ADIOS EGYPT

Adios Llego la hora de decir adiós, no fue tan dramático como creí, tus ojos húmedos y los míos un poco más, me pediste mi loción Hugo Boss, dijiste que para bañar tu almohada por las noches, te lo di con todo mi amor y mi sudadera de New York, hoy te vi con la sudadera rosa que te regale y la bolsa que te compre en Querétaro, voy a extrañarte mucho pero no sé porque estoy tan tranquilo, quizá no me ha caído el veinte de que mañana ya no poder verte, que ya no pasaras por mí al hotel para irnos a pasear todo el día de la mano a descubrir cosas del antiguo Egipto, sonriendo como niños, amando como nunca. Es cierto que mañana no voy a verte, ni escuchar mi nombre de tus labios, quejándose dulcemente por alguna cosa, es cierto que no habrá que escondernos mañana para darnos un beso en cualquier parte, pero hubo algo el ultimo día, un alumbramiento, una oportunidad, no solo esperar por esperar que llegue la fecha que hemos puesto en el calendario para volver a vernos, hubo un parpadeo de luz en los ojos del destino, el milagro que pedí en los pies de la puerta. Hablábamos de esto antes del viaje, de ser el líder de México de Uniway. Ayer en el café de la mañana conocí a Nader Atallah, el acuerdo fue muy claro si yo logro convencer a 10 personas de trabajar comprometidamente en Uniway network marketing, el visita México para abrir el país a este negocio. No dejo de pensar que Malak también. La promesa entre Malak y yo dice septiembre 15, pero nos miramos a los ojos en ese momento y pensamos que podía ser mucho antes.